
Qué bueno es Landa,me soplo el puente/viaje porque es él quien jura, quien increpa, quein se putea a sí mismo. Hay reiteraciones de road movie en dos llantas (lo de los hippies parece un patético intento de empatar España con la era de acuario gringa), pero buenos diálogos y observaciones documentales, y el gran gag de Landa semidesnudo ante el cortejo funebre.