Estuve un poco ausente de ver cine por empezar a escuchar música sin parar por un largo periodo de tiempo. Sin embargo, he decidido darle otra oportunidad tras haber visto casi cuatro mil películas. En la reseña de hoy, me gustaría entonces hablar de Ciudadano X (Citizen X), la cual vi la semana pasada y de la que preservo una memoria fresca al respecto.
Siendo una producción de HBO y una película directo a televisión, se deja notar que no tiene un presupuesto grande que pudo usar en escenarios y recreaciones mejor logradas. Los escenarios son muy teatrales en el sentido que sirven sólo para que los personajes hablen en escena al estilo de Doce Hombres Enojados. En ese sentido, el aspecto visual deja algo que desear dado que se centra muy en las actuaciones. Es una película muy violenta en el papel (por dar un ejemplo de lo que digo), pero la película tiene escenas de asesinatos poco logradas. Tienes cosas como que el asesino Chikatilo apuñala a una chica tras tener relaciones sexuales con dicho asesinato mostrado a la lejanía para que no se note que la escena es falsa. No se logra porque el actor no mueve el cuchillo con una fuerza natural y que la tipa se la pase gritando en lugar de hace algo para librarse. También usa mucho este recurso de mostrar los niños asesinados en cámara lenta una y otra vez mientras babean un hilo de sangre. De nuevo, es para no mostrar las escenas de muerte en el acto en parte por censura y por los recursos limitados.
Puedo concederle algo y es que los actores son de buen calibre actoral dado que tienes a Donald Sutherland, Max von Sydow o Stephen Rea en el reparto. Estos tres casi que hacen la misma clase de personajes: Sutherland al sabelotodo con estatus como en Los Juegos del Hambre; Rea al serio defensor de lo correcto como en V de Venganza; Sydow al intelectual melancólico como en El Exorcista. Esto mismo se repite aquí y la verdad que saben como recrear por ahí a sus papeles. Los demás actores ofrecen una buena actuación como el sujeto que interpreta al asesino con esa actitud introvertida y pusilánime, pero con una apariencia que claramente da mala espina.
Como verán es una película enteramente enfocada en los personajes centrados en un pequeño reducto de la Unión Soviética. No hay localizaciones deslumbrantes; sólo mucho bosque que rodea una villa y uno que otro panfleto de Lenin por ahí. Con esos pocos elementos lo que busca es básicamente dar una visión muy negativa de la URSS como este estado policial super intransigente y con políticos corruptos. Los altos burócratas del partido sólo aparecen en sus mítines cada tanto para trabar la investigación mientras el protagonista busca una forma de adaptarse a lo poco que tiene para atrapar a un asesino de niños a sueldo.
Esto puede generar sentimientos encontrados porque la película se enfoca mucho en estos personajes de alto rango que son sólo obstáculos más que personajes en sí. Lo poco de caracterización que tienen es ser molestos mandamases que de plano su líder sostiene relaciones sexuales con efebos. Esto es bastante reduccionista; jamás se verá como dichos antagonistas cubren un rol proactivo en el filme aunque, es verdad que resulta en una visión interesante sobre dichos estados policiales: el enfoque en la imagen y la apariencia parece más importante que hacer las cosas bien. Es por eso por lo que se logra usar estos limitantes como un tema central sobre como una sociedad entera preferiría aparentar ser capaz de resolver problemas que no tiene idea de manejar.
Debo recalcar que por ahí la película medio que puede ser vista como una precuela espiritual de Chernóbil. Esa miniserie tenía el mismo enfoque que Ciudadano X, sólo que con mejores efectos, presupuesto y con sentido de la tensión más elevado. Aquí el dilema tiene un nivel terrenal puesto como se inicia la película con las autoridades admitiendo que no tienen un equipo de investigación de asesinatos; que el protagonista saca su impresión de como debe ser un grupo de investigación de películas de Estados Unidos entre otras faltas de profesionalismo extremo.
La película no es enteramente mezquina con esta sociedad pues una cosa que hace para enganchar es la actitud proactiva del forense devenido a detective que debe lidiar con todos los inconvenientes de su país. El hecho que haya estado bajo el mismo caso sin parar por como una década demuestra una determinación respetable y admirable. A su vez, no se enfoca solo en eso; el detective tiene un foco considerable en sus relaciones con otros personajes menores como su familia o sus asistentes. Uno de ellos al inicio de la película actúa de forma hostil contra el protagonista, pero viendo el esfuerzo que ha tenido junto su capacidad de buscar formas de investigación provisionales con unos mangos hace que su actitud cambie a mejor.
Ese elemento se demuestra mejor con el personaje de Sutherland; un coronel que al principio actúa de manera adversa contra Rea, viéndolo como un tonto que no capta como se trabaja en el sistema soviético. Pese a ello, con el pasar de los años este cambia de parecer y busca ayudarlo en vez de ponerle trabas. Diría que también tiene algo de desarrollo al mostrarse como al igual que el investigador van molestándose como no tomarse en serio los asesinatos permite que sigan ocurriendo. El más afectado sería el investigador quien llega a tener colapsos emocionales. En menor medida también el coronel que demuestra ser no sólo un burócrata más.
Desde otra óptica, se tiene el corto aunque interesante ingreso del psiquiatra de von Sydow a la mitad de la película. Su segmento a pesar de tener poca duración hace otro punto similar: en la Unión Soviética los diagnósticos psicológicos pueden ser denostados dado la mala recepción del régimen a que se descubran los mecanismos por los que una persona hace lo que hace. Según este personaje, en una sociedad de locos sería mala idea hacer tales cosas. Creo que la película es más sutil aquí que con lo otro. Debe ser porque tiene un foco reducido y sin villanos unidimensionales que sirvan de obstáculos artificiales. Lo poco que se muestra es que los propios psiquiatras que querían reclutar para la investigación prefiriendo irse para no arriesgar sus carreras. Podría igual criticar no muestra el tren de pensamiento del psiquiatra para diagnosticar al asesino, así que sería un caso de mostrar las cosas y sólo decirlas.
Relacionado a aquello, estaría todo el tema de los cambios sociales ocurridos en esos años. La película llega a un punto donde la Unión Soviética termina por aprobar la Perestroika o la Glásnost como políticas de estado. De un momento a otro los burócratas que fastidiaban en un inicio desaparecen y el coronel se vuelve general. De nuevo, es algo que podría generar opiniones diferentes. Tienes que la sociedad acaba por ser un tema central de algo tan pequeño como el desarrollo de una persecución contra un asesino, cosa que es interesante y un enfoque político a algo que en otros contextos no lo tendría. Lo malo es que dicho cambio vino de fuera de los personajes, así que sólo estaría reaccionando a aquello sin estar involucrados activamente. Los hace ver como meras marionetas de su sistema y que la solución no vino de mano propia. Tampoco se explica como es que el coronel pasó a ser general o las razones detrás del despido de los burócratas del inicio.
Como sea, creo que la película aún en esas tiene más cosas positivas que negativas y eso respecta mucho en el enfoque. A diferencia de otras películas de asesinos seriales, Ciudadano X es un drama político con tonos psicológicos detrás muy humana. Si hay algo que las películas de asesinos han hecho hasta el hartazgo es ser copias del Silencio de Los Corderos. Siempre son película de cuasi terror donde asesinos exagerados hacen locuras o cosas imposibles. Eso lo encontramos en Se7en o en Zodiac, pero en este caso no ocurre. Desde el inicio conocemos la vida social del asesino al igual que su miserable interacción con sus compañeros de trabajo y familia. Su motivación para cometer asesinatos se entiende desde el vamos y en primera persona en lugar de ser una caja misteriosa que los demás personajes deben resolver. Desde dicha perspectiva se podría decir que es una película predecible, pero sin embargo es mejor enfocada en el personaje que dispara la trama. También por sus métodos de asesinatos fácilmente trazables es que se siente más real que los elaborados métodos de otros asesinos y que se haya salido con la suya en una ocasión sea temáticamente relevante otra vez por los tropiezos en la investigación.
Relacionado a ello está lo que transcurre en medio de los asesinatos como que los personajes tengan que investigar perímetros, intentar buscar maneras de ir en cubierto pese a no tener experiencia en ello, ir de un lugar a otro recabando información, etc. En cierto modo sería como una forma de ver en vivo y en directo como se forman las agencias de investigación en la vida real. Ese sería otra cosa que hace la película atractiva; se trata de un siniestro de la vida real que ha dejado una marca en las agencias rusas, así como algo que ha repercutido en menor medida en las investigaciones alrededor del globo.
Tampoco diré que es una obra maestra porque pese a las muchas cosas positivas o conflictivas que dije, sí que hay problemas en algunas decisiones artísticas. Acabar la película con la ejecución en frío de Chikatilo sin haber dado más enfoque en los que son los protagonistas es extraño y algo shockeante como conclusión. Tampoco haber mostrado más del drama de dicho asesino en su vida cotidiana y saltar de lleno a sus asesinatos es otro tema que decepciona (¿si ya se enfocaron en su psique, para que dejan de mostrarla?). Este tema al final se termina de enseñar por medio de dialogo expositivo en un interrogatorio. Es muy raro porque la película hace que la audiencia pueda sentir pena por un loco que mató y violó tanto vivos como muertos a docenas de niños y mujeres. Por otra parte, sigue siendo algo que se dio de golpe justo al final en lugar de desarrollarse por medio de vivencias y actos.
Me gustaría para concluir compararlo con otra película similar, Memorias de un Asesino. Esta producción coreana es la misma película que Ciudadano X, ambas basadas en casos reales donde los policías van cambiando sus maneras de actuar viendo la seriedad de un asunto que veían como menor. Creo que Memorias de un Asesino tiene el plus de tener un mejor manejo de la caracterización de los investigadores que no existe tanto en esta película. Por otra parte, Ciudadano X tiene el merito de tener un final de verdad dado que a Chikatilo sí lo atraparon en la vida real.
Creo que eso es lo que también le diferencia de esas otras películas, que ahí el final es sólido y catártico. Así que pese a los serios problemas de presupuesto y exposición, creo que por aquello merecería estar a la par o incluso puesto en una posición superior a sus equivalentes del género.
Apartado visual: 6/10
Dirección general: 1/3 (competente, pero repite los mismos trucos)
Escenografía: 1/2 (limitada y se nota el bajo presupuesto)
Actuación: 2/2 (competente)
Efectos especiales: 1/2 (cutres, pero el setting excusa su modestia)
Apartado sonoro: 6/10
Dirección general: 2/3 (Ok creo)
Actuación de voz: 2/2 (lo mismo que la actuación)
Banda sonora 1/2 (orquesta genérica, pero cumple su rol)
Efectos sonoros 1/2 (ok creo)
Trama: 7/10
Premisa: 2/2 (historia de asesino serial más centrada en el drama y las implicaciones políticas)
Ritmo: 2/2 (ameno)
Plausibilidad: 1/2 (basada en hechos reales con métodos de investigación y modus operandi creíbles, aunque con cambios sociales fuera de escena)
Exploración: 1/2 (Repetitiva y algo caricaturesca, pero polifacética y centrada)
Conclusión: 1/2 (salvo por personajes de fondo, el caso se cierra)
Personajes: 9/10
Presencia: 2/2 (personajes proactivos)
Personalidad: 1/2 (si no fuera por los burócratas sería perfecto)
Exploración: 2/2 (fuertemente centrada en la psicología del asesino y de los investigadores cercanos)
Desarrollo: 2/2 (los principales cambian un montón)
Catarsis: 2/2 (los principales reciben sus conclusiones apropiadas)
Nota final: 7/10