Batman tiene un desarrollo bastante competente en este juego, siendo acompañado por una figura fantasmal/psicologica del Joker demostrando que no puede existir el uno sin el otro. Además, este recurso es excelente, porque en un juego con muchos momentos de "transición" el avanzar hacia lo importante deja de ser lo único valioso, porque los dialogos del Joker, sean cómicos, agrios, o siniestros, exploran la mentalidad del protagonista de una forma tan retorcida que es brillante. Por otro lado, los secundarios estan bien, todos se desarrollan en base a la figura de Batman pero siguen cumpliendo. Incluyendo al Espantapájaros, no es la gran cosa como antagonista pero maneja muy bien la tensión de la historia, siempre se siente como que esta por encima nuestro y te deja en situaciones de "Y ahora como afrontamos esto"
Ahora, el juego NO es perfecto. El Arkham Knight como antagonista es bastante mediocre, no porque sea Jason Todd, lo cual era obvio, sino porque una vez dada la revelación no se explora nada del personaje, ni con dialogos ni sutilezas. No hay redención, no hay perdón, ni hay una moralidad interesante como si la tiene el personaje de Red Hood en los comics. Es como que trataron de replicar a este personaje pero en un universo donde el Joker esta muerto, lo cual para el personaje de Jason Todd es un cambio drástico.
Y obvio, otro aspecto negativo, es la saturación de misiones del Batimovil. Personalmente no me molestan y las disfrute bastante. Ahora, cuando lo llevaron a "misiones de sigilo" con el auto, eso fue demasiado. La gente quería manejar el auto para sentirte Batman por la ciudad, no que sea siempre un arma más.
También vale aclarar que como es costumbre, esta saga es muy buena a la hora de motivarte a completar el 100% del juego. La mayor parte de contenido ajeno a la historia esta bastante bien. Algunas cosas pudieron tener mucho más provecho como Hush o Deathstroke, pero son esos pequeños detalles de los que la verdad no me voy a quejar.
Es de mis mejores experiencias con un videojuego, adictivo, inmersivo, y se nota el amor puesto en cada parte.