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Esta serie comenzó de una buena manera, siendo una comedia bastante efectiva que era particularmente graciosa al hacer un contraste entre ciertos temas oscuros y unos dibujos simples. La serie fue bastante única desde su inicio, con personajes con una buena caracterización y un mundo realmente interesante y creativo.
Aun así, nunca pasó de ser más que una serie graciosa en sus inicios, aunque dio ciertas pistas de que la trama podría ir a algo más interesante, cosa que hizo y con creces en la tercera temporada.
A partir de ahí, la serie introduce a un villano intimidante, establece una verdadera continuidad, pero por sobre todo empieza a explorar a los personajes, estableciendo sus creencias, sus motivaciones y sus conflictos. Es en la tercera y cuarta temporada cuando se expande en las primeras temporadas, explorando los mundos que no habían sido explorados, explorando los personajes que no habían sido tan relevantes y los que lo habían sido y dándole un trasfondo a las cosas, explicando por qué el rey el helado es como es, por qué Marceline tiene un conflicto con su padre, por qué Finn y Jake son hermanos y por qué hay magia en el mundo de Ooo, estableciendo que todo fue el fruto de una guerra que desencadenó en una bomba atómica.
Aun así, la serie seguía siendo graciosa y entretenida, aun estando apegada a sus raíces.
Pero esto cambió en la quinta temporada, cuando la serie dejó de ser graciosa y, de hecho, tuvo episodios que eran hasta pesados de ver o incómodos por los temas que exploraban. Para este punto, la serie se volvió extremadamente filosófica, depresiva y demente, teniendo capítulos como Too old u All your fault, que mostraban la psicosis de personajes anteriormente cómicos como los limón agrios, que crearon a una sociedad de gente retrasada para torturarlos y verse como gobernantes suyos. Capítulos como Frost and fire u All the little people, que mostraban una faceta negativa de Finn y hasta que punto podía llegar para sus propósitos egoístas.
En su quinta y sexta temporada, la serie se volvió una de mis preferidas por esto mismo, por atreverse a tocar temas complejos aun a expensas del gusto popular, que, de hecho, declinó en esta época y es motivo por el cual la gente dejó de ver la serie, ya no les daba risa, y de hecho ya no era una serie apropiada para niños.
La serie se volvió tan compleja y filosófica que exploró una variedad de temas enorme, como lo son el existencialismo, el nihilismo, la individualidad, la espiritualidad, el valor de la libertad, el egoísmo, el hedonismo, la manipulación, el instinto humano, etc.
Hora de aventura sería una auténtica obra maestra si no fuera porque, por cada capítulo así, había uno aburrido y sin chiste que no venía al caso. En la temporada 7 estos capítulos se volvieron más, y a pesar de seguir siendo una temporada con episodios increíbles como The hall of egress, estos episodios fueron cada vez menos y la serie empezó a tambalearse entre capítulos aburridos y episodios complejos e interesantes, a parte de que la serie empezó a tener una especia de manía de revertir las cosas. X personaje muere, es resucitado, X personaje pierde tal cosa, la recupera. La serie empezaba a ir en círculos, aunque si les soy sincero, no me parece un problema tan grande como en series como Rick y Morty, ya que al menos aquí, algunas de estas cosas que eran revertidas eran simbolismo o eran parte de algún mensaje que quería dar la serie, como es el caso del brazo de Finn o el dulce reino.
Las temporada 8 y 9 (y 10, depende tu listado), tuvieron un enfoque más grande en la continuidad, con arcos argumentales uno tras otro que exploraban los conceptos que no habían sido explorados antes, como la madre de Finn o la familia de la dulce princesa. Unos errores de estas temporadas es que el Lich aparece nuevamente, pero es derrotado fácilmente, quitándole el peso que el personaje tenía originalmente, al igual que personajes como Fern, el hombre mágico y Betty cambian, no por un verdadero desarrollo, si no por magia, lo cual hace ver como si los personajes no pudieran hacer nada por cuenta propia y dependieran de la aleatoriedad de la magia.
Sin embargo, no puedo no decir que esta es una buena serie. Lo que llegó a hacer es sin duda lo mejor que he visto en, no solo una serie animada, si no que una serie en general, y no solo en una serie en general, si no en una obra de cine o animación.
El final de hora de aventura es increíble y hace que, aun que hubiera tenido sus errores, acabe con un excelente sabor de boca y recordando lo excelsas que fueron la quinta y sexta temporada.
La serie que patea a Rick y Morty y destroza a Steven Universe.
