En líneas generales es una película muy entretenida con un par de fallos importantes; el primero es que al ser un remake hace muy poco por trascender independientemente de la obra original y solo se aprovecha de esta tendencia retro que ha caracterizado a los 2010's, además de eso está el hecho de que la gente más observadora notará un problema importante de ambientación y es el hecho de que las interacciones de los personajes parecen personas de hoy en día en un pueblo decorado como en los 80's.
Estos dos aspectos difícilmente pueden hacer menos disfrutable la película y por ello me parece altamente recomendable para ver con tu grupo de amiguitos de películas de terror.