Esta película es tan mala que muchísima gente ha olvidado que llegó a existir. Es el ejemplo perfecto de cómo NO hacer una cinta licenciada, se nota a kilómetros que la realizaron sin tener ningún conocimiento del material original a sabiendas de que vendería por el solo hecho de llamarse "Dragon Ball".
PD: aún al sol de hoy me da risa el Piccolo azul.